Aunque muchos se sorprendan, Jennifer Lopez ya cumplió 56 años y no muestra señales de bajar el ritmo. Jennifer sigue marcando tendencia no solo en la música y en el cine, sino también en el gimnasio, donde su físico impecable despierta la pregunta inevitable: ¿cómo hace?
Su entrenador de confianza, Jay Cardiello, reveló la clave y derribó mitos. Nada de fórmulas mágicas ni series eternas de abdominales. “Es el ejercicio más efectivo y sencillo para fortalecer el core”, aseguró, refiriéndose a la plancha como la base de todo. Sí, JLo confía en un movimiento que parece simple, pero que esconde la fórmula para mantener la zona media en forma.
La rutina no se queda ahí. López se somete a planks dinámicos, escaladores y hasta ejercicios con balón que ponen a prueba no solo el abdomen, sino glúteos, brazos y espalda. El combo, además, sube la frecuencia cardíaca y funciona como un entrenamiento integral que combina fuerza con cardio.
Pero Jennifer complementa con circuitos explosivos: burpees, saltos, rotaciones de tronco y elevaciones de piernas. Todo pensado para mantener el cuerpo fuerte y, de paso, esculpir esa silueta que la artista luce desde hace décadas sin perder frescura y elasticidad.
LOS BENEFICIOS DEL ENTRENAMIENTO DE JENNIFER LÓPEZ
Según Cardiello, entrenar así fortalece la postura y ayuda a prevenir lesiones, un detalle que se vuelve fundamental con el paso de los años. En otras palabras, Jennifer López no entrena para la foto nomás: entrena para vivir con potencia y dejarlo todo en el escenario.
Lo cierto es que, a los 56, Jennifer López sigue demostrando que el paso del tiempo no la detiene. Su secreto está en la constancia, en no quedarse en lo fácil y en sostener una rutina que, a esta altura, se volvió casi una marca registrada. ¿El resultado? Un abdomen de acero que ya es un hit.