Nada es para siempre, pero con algunos cuidados, tus ahorros en dólares pueden conservarse de la mejor manera.
-
Oportunidades de inversión frente a un dólar depreciado que reconfigura el rumbo de los mercados
-
Revisa tus ahorros: el billete de cinco dólares que le puede dar una gran alegría a tus bolsillos
Escondites como cajones falsos pueden ser económicos y despistar posibles ladrones.
Es común que en nuestro país tengamos un especial interés en el dólar. Ya se para resguardarnos de la inflación o para cubrirnos de eventuales devaluaciones, la divisa suele ser la más requerida por los ahorristas, inversores, importadores o incluso los turistas.
Como el mercado más accesible para conseguirla es el informal, normalmente se consiguen billetes físicos en la calle, a través de los arbolitos o en cuevas o casas de cambio. Y para preservar el estado de estos billetes, hay que tener en cuenta algunos factores que los pueden dañar.
Dólares ahorros
La mejor manera de conservar los billetes para prolongar su duración.
La vida útil de los dólares: cuál es la duración promedio de los billetes
La vida útil de los billetes depende de varios factores. En principio su lugar de conservación, pero también del uso y circulación que se le dan. Entre los más utilizados se encuentran los de 5 y 10 dólares, y entre los menos utilizados los de 100.
Por este y otros motivos, la duración promedio es la siguiente:
- 1 dólar: 6,6 años.
- 5 dólares: 4,7 años.
- 10 dólares: 5,3 años.
- 20 dólares: 7,8 años.
- 50 dólares: 12,2 años.
- 100 dólares: 22,9 años.
Esta duración depende estrictamente del uso y conservación que se le den a los ejemplares.
Los mejores trucos para conservarlos
Para preservarlos de la mejor manera, hay que tener en cuenta los factores que más los dañan, como la luz, calor y humedad y tratar de alejarlos. Lo mejor es guardarlos en lugares frescos, secos y oscuros. También, se debe optar por recipientes seguros, evitando latas o elementos que se puedan oxidar y los mantengan cerrados al vacío.
Es clave poder mantenerlos en sitios donde no estén permeables a las inundaciones, filtraciones, y calores y evitar arrugarlos o forzarlos con bandas elásticas y objetos similares. Mientras más planchados estén y menos se toquen, más van a durar.