Los hermanos rusos Facundo Román (15) y Santiago Nikolai (13) Nervi Pérez Aramburú fueron hallados en la tarde de este martes en un terreno abandonado en la zona de Pilar.
Fuentes policiales confirmaron a Clarín que ambos adolescentes se encuentran en buen estado de salud y se dirigían a la comisaría de Pilar para reencontrarse con sus padres.
Facundo y Santiago salieron este lunes bien temprano desde su casa, en un barrio cerrado de Pilar, rumbo a su colegio, pero nunca llegaron, lo que disparó la alarma de las autoridades, que lanzaron un operativo de búsqueda.
Su mamá, Evangelina Pérez Aramburú (48), contó a El Diario de Pilar que ambos estaban con el uniforme y se dirigían al Instituto Atlético Pilar, adonde saldrían a las 16.
Una cámara de seguridad los captó cuando caminaban, a las 6.18, hacia la autopista Panamericana, tras salir de su casa en el barrio Santa Silvina.
Los chicos son de nacionalidad rusa y fueron adoptados por esta familia hace nueve años.
De acuerdo a lo que se informó, ninguno llevaba teléfono celular, como tampoco tarjeta SUBE y dinero.
Esto fue confirmado en la mañana de este martes por el papá de los chicos, Sebastián Nervi (48), quien dijo al canal América que «a la escuela no pueden ir con celular, así que no llevaban nada como para poder rastrearlos».
El hombre, que es ingeniero, contó que el viernes pasado «hubo un pequeño altercado con una vecina, nada del otro mundo», por lo que hubo una discusión con ellos, pero remarcó que «nada que los haga pensar que tomaran una decisión así».
Según pudo saber Clarín, el padre les reprochó que habían molestado a la vecina, a la que rodearon en sus bicicletas, dando vueltas alrededor de ella, por lo que ellos se enojaron.
«Estamos sorprendidos», expresó y admitió que no es la primera vez que se ausentan del hogar.
«El más chico, Santiago, en un par de oportunidades se escapó. Tiene déficit de atención e impulsividad. Ahora está medicado», indicó.
En el operativo de búsqueda participó personal de la SubDDi Pilar, en el marco de una causa por averiguación de paradero que se inició en la UFI especializada en delitos conexos a la trata de personas de San Isidro, que conduce el fiscal Gonzalo Acosta.
La denuncia de la desaparición fue radicada por Nervi en el destacamento Agustoni.
AA