La irrupción de Cristina Fernández de Kirchner en las listas bonaerenses reaviva tensiones internas en el peronismo y reordena el mapa político de cara a octubre.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el analista político, Pablo Roma, quien comentó que, “la confirmación de la candidatura de Cristina modifica un poquito el armado porque es una dirigente que tracciona y moviliza al electorado peronista”.
Según Roma, aún no hay unidad cerrada dentro de Unión por la Patria, pero el ingreso de Cristina presiona a otros sectores, como el kirchnerismo puro, el massismo y el propio Axel Kicillof. “La unidad sigue siendo un lugar al que el peronismo debe llegar, porque si van separados el potencial electoral se debilita”, advirtió.
La nacionalización de la campaña, ¿fortaleza o amenaza?
Uno de los efectos inmediatos del regreso de Cristina es el corrimiento de la agenda hacia una discusión nacional. “Con Cristina candidata, todo va a girar en torno a ella”, afirmó Roma, quien señala que la campaña deja de ser puramente provincial.
Esto plantea un dilema para Kicillof. Mientras algunos intendentes prefieren mantener el enfoque en lo territorial, “el gobernador queda obligado a reconsiderar su estrategia”, sobre todo si quiere sostener su acuerdo con los jefes comunales y garantizar gobernabilidad.
El debate por el desdoblamiento: una carta en juego
Entre las herramientas de negociación entre Cristina y Kicillof, aparece el desdoblamiento electoral. Roma fue tajante: “El desdoblamiento no le convenía al peronismo. Unificar fuerzas era más eficaz en una situación de debilidad”.
La posibilidad de unificar los comicios provinciales con los nacionales puede convertirse en moneda de cambio. “El acuerdo con los intendentes condiciona al gobernador, porque ellos quieren resguardar su elección”, explicó Roma, quien también advierte que los liderazgos locales no siempre se alinean fácilmente con las discusiones nacionales.
Milei, el veto y la narrativa peronista
Ante la media sanción de la reforma jubilatoria, y la posible reacción del presidente, Roma analizó el efecto en campaña: “Que los jubilados paguen el costo del ajuste no cae bien. Es un sector muy vulnerable y eso le da al peronismo un recurso discursivo fuerte”.
Aunque cree que un nuevo veto no será un quiebre decisivo, sí puede revitalizar la narrativa opositora. “Puede no condicionar a Milei, pero sí fortalecer el discurso del peronismo en Buenos Aires”, señaló.
La respuesta libertaria: ¿competir o replegarse?
Respecto a cómo reaccionará La Libertad Avanza frente a Cristina, Roma considera que intentarán disputar otras secciones: “La tercera es difícil para ellos. Tal vez pongan un candidato fuerte para polarizar, pero su mejor estrategia sería intentar ganar en el resto de las secciones”.
En ese contexto, el rol del PRO será clave. “Habrá que ver si pueden imponer un candidato fuerte o solo acompañan desde atrás”, planteó Roma. Tanto Cristina como Milei, según él, comparten una cualidad: “Ambos rompen con lo esperable del escenario electoral, traccionan y movilizan”.